Interiorismo de restaurantes
Calle Pez Austral, 2 Madrid - 28007
NTERIORISMO DE RESTAURANTES
Para hablar de un buen interiorismo de restaurantes debemos hablar de ello como un proyecto de interiorismo comercial. El interiorismo comercial debe desprenderse de la moda popular, de los intereses particulares del proyectista, y centrarse en el cliente de forma inteligente. Solo así puede entenderse el interiorismo como una potente arma comercial; con un objetivo: vender más y a mayor precio. Para ello hay que empezar conociendo el modelo de negocio y atendiendo en cualquier caso a los siguientes elementos:
Conexión emocional · Importancia del cliente · Originalidad respecto a la competencia
ESTAR A GUSTO
La conexión emocional viene dada por la experiencia que tenga el cliente al comer en nuestro restaurante. Hacer que el comensal se sienta como en el salón de su casa puede llegar a conseguirse si conseguimos una iluminación adecuada, una acústica controlada y un entorno agradable a la vista.
La iluminación debe ser cómoda a la vista, y controlada para producir intimidad en cada mesa. Con puntos de luz tenues e individuales y la calidez adecuada. Cuidando la intensidad para no producir deslumbramientos, sombras incómodas o zonas oscuras.
Un buen diseño con piezas atemporales; materiales nobles como la piedra, el acero, el hormigón, la madera; y un buen uso de la vegetación, son claves que nunca fallan para crear un ambiente agradable.
QUIÉN VA A VISITARNOS
Una vez tenemos la base para que alguien quiera entrar y quedarse, llega la hora de fijar nuestro target, o cliente tipo. Esto es lo que definirá el restaurante, lo que le dará homogeneidad. Aquí viene la elección de un correcto mobiliario.
Por un lado debemos saber qué tipo de cocina es la que ofrecemos: una cocina rápida y tradicional puede complementarse con muebles autóctonos y menos confortables para una mayor rotación de clientes, y por el contrario una comida más experimental o sensorial deberá ir acompañada de una decoración más contemporánea y pensada para largas estancias.
Acompañado de todo ello, no debemos olvidar que el restaurante debe tener un buen funcionamiento para no incomodar al cliente, por lo que la funcionalidad es indispensable. Un restaurante bonito está bien, uno bonito y funcional es excelente.
SERVICIO ÚNICO
Todo debe girar en torno a la experiencia del cliente. Un buen servicio y una buena calidad del producto que se ofrece son importantes, pero no suficientes hoy en día. Teniendo en cuenta todo lo dicho y transmitiendo aquello que hace único el servicio que ofrece el restaurante, es sencillo destacar frente a la competencia y hacer que la decoración haga que un cliente quiera repetir.
